Para los indios, habitantes libres y dueños de esas tierras desde el origen de los tiempos, reserva otros planes: serán despojados de su cultura y modos de vida y convertidos en míseros jornaleros asalariados, que trabajarán de sol a sol a su servicio.
Os enrolaréis en una expedición científica internacional para explorar las tierras de los Yanomamis con la misión de clasificar la existencia en esa zona de especies amenazadas de gran valor para la ciencia y medicina a nivel mundial. Si lográis solventar con éxito vuestro reto se podrá declarar la zona como reserva natural, paralizando así los lucrativos planes de la poderosa empresa multinacional… ¿Estáis dispuestos a participar en esta apasionante aventura en defensa de la selva y quienes la habitan?
Ésta es la trama que guía uno de nuestros nuevos juegos cooperativos, “Expedición Amazonas”, con el que hemos querido hacer nuestra pequeña aportación en la defensa de la Amazonía, para denunciar su peligro de desaparición y reivindicar su increíble biodiversidad, imprescindible para el bienestar de las generaciones futuras y su enorme valía para toda la humanidad.
Un paraíso amenazado
La selva amazónica es la selva tropical más extensa del mundo. Se considera que su extensión llega a los 6.000.000 de km² repartidos entre nueve países sudamericanos (una extensión casi tan grande como Australia). No nos quedamos cortos al afirmar que es un paraíso lleno de vida, cuya enorme fecundidad estamos destruyendo sin apenas conocerla. La Amazonía tiene algo así como el 20% de toda la biodiversidad en el mundo.
La Amazonía es hogar de todos los pueblos y personas que viven en ella y de cientos de miles de especies animales y vegetales, muchas todavía por descubrir, que juegan un papel crítico en la regulación del cambio climático y el sostenimiento del ciclo del agua local.
Para ilustrar esta afirmación os ofrecemos algunos datos de interés…
- La Amazonía representa el 54% de la totalidad de selvas tropicales existentes en la Tierra.
- Más del 20% del oxígeno de la Tierra es generado en esta región, por lo que se ganó el apodo de los “Pulmones del Planeta”.
- Las cuencas del Amazonas, Paraná-Plata y Orinoco juntas, proveen al Océano Atlántico más del 30% del agua renovable del mundo.
- Más de la mitad de los 10 millones de especies de insectos, plantas y animales que se estima existen en el mundo se encuentra en la selva tropical Amazónica.
- La variedad de aves de la selva Amazónica constituye al menos 1/3 de todas las especies del mundo.
- El número de frutos comestibles que crece naturalmente en la selva es aproximadamente 3.000. Solo 200 variedades son cultivadas.
- El 70% de las plantas conocidas en la actualidad con propiedades anticancerígenas provienen de la selva tropical.
- La valiosa riqueza natural de esta zona no deja nunca de sorprendernos y se evidenció recientemente con el descubrimiento de un hongo en el Amazonas que come plástico, que degrada y consume poliuretano.
- Pero quizás, el más relevante de los datos entorno a la selva Amazonica es que aproximadamente el 90% de las plantas medicinales utilizadas por los nativos de la Amazonía no han sido todavía estudiadas por la ciencia moderna.
La deforestación y sus consecuencias
La deforestación es la principal amenaza de la Amazonía y, con ella, del equilibrio climático de nuestro planeta. Los expertos alertan que, de seguir deforestándola al ritmo actual, en 50 años habrá desaparecido.
En los últimos 40 años solo en Brasil se ha perdido una quinta parte de su superficie, un área más grande que toda Francia. Las mayores amenazas de la Amazonia son el comercio ilegal de la madera, la expansión de la frontera agrícola para cultivo de soja, y la expansión ganadera para obtención de carne. Aunque nos parezca un tema lejano, según alertan desde Greenpeace, “España es parte del problema” ya que es uno de los mayores importadores de madera amazónica. “Somos –señala Greenpeace- los cuartos importadores de maderas como el ipé, destinadas a tarimas y construcción exterior como puentes y pasarelas. También a España llegan productos vinculados a la deforestación amazónica, como los piensos procedentes de la soja o la carne y cuero procedentes de las expansiones ganaderas”.
En el año 1500, el número de nativos Amazónicos se estimaba entre 6 y 9 millones. A principios del 1900 esta cifra se había reducido a 1 millón en Brasil. Existe un número de aproximadamente 50 tribus que habitan en el corazón de la selva Amazónica que jamás han tenido contacto con el mundo exterior.
Los Yanomanis, el pueblo en el que se ha inspirado nuestro juego “Expedición Amazonas”, son el pueblo indígena relativamente aislado más numeroso de América del Sur. Viven en las selvas y montañas del norte de Brasil y del sur de Venezuela. Precisamente, hace solo unas semanas que indígenas yanomanis de la Amazonía brasileña dieron la voz de alarma por la “desaparición” de indígenas aislados.
El territorio indígena yanomami fue creado oficialmente en 1992, tras una prolongada campaña impulsada por Davi Yanomami, Survival International y la Comisión Pro Yanomami en Brasil. Es el mayor territorio indígena selvático del mundo.
Miles de mineros ilegales llevaron a su selva violencia y enfermedades en los años 80, diezmando a la población yanomami en un 20%.
Los Guardianes del bosque
Según informa Greenpeace, la mayoría de los pueblos indígenas de la Amazonía han visto su territorio reducido al mínimo tras sucesivas invasiones, expulsiones y usurpaciones a manos de los gobiernos, empresas madereras, ranchos ganaderos y grandes plantaciones
“El contacto con colonos, buscadores de oro y otros trabajadores, que a menudo operan de forma ilegal, -apunta Greenpeace- ha causado continuas epidemias de enfermedades ante las cuales los pueblos indígenas no tienen inmunidad. Muchas comunidades han sido diezmadas. Se trata de comunidades que dependen del bosque para vivir. De la selva extraen comida, refugios, herramientas y medicinas. Además, los bosques juegan un papel crucial en su cultura y sus creencias religiosas”. Pero asegurar el futuro de la Amazonia es vital no solo para sus habitantes, sino también para nuestro propio futuro y el de las próximas generaciones. Ya ha perdido el 18% de su superficie, y su destrucción continúa. Sin la Amazonía, las condiciones de vida de todo el planeta cambiarían drásticamente. La incógnita sobre su futuro es clave en la lucha contra el cambio climático.
ONGS y Entidades en defensa de la Amazonía
Estas son algunas de las principales organizaciones que trabajan por la conservación de la selva Amazónica y sus habitantes:
Survival International
Defiende los derechos de los pueblos indígenas del mundo.
Coordinadora Estatal de Comercio Justo
Garantiza condiciones de vida dignas y modos de producción respetuosos con el medio ambiente.
WWF
Fondo Mundial por la Naturaleza.
Consejo Administración Forestal (FSC)
Lucha contra la tala de madera ilegal.
Greenpeace
Organización ecologista internacional cuyo objetivo es proteger y defender el medio ambiente y la paz.
Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
Organización internacional dedicada a la conservación de los recursos naturales.
Ecologistas en Acción
Ecologistas en Acción es una confederación de más de 300 grupos ecologistas de todo el Estado español
Oxfam Intermon
ONG que trabaja en desarrollo, acción humanitaria, comercio justo y sensibilización, con el objetivo de erra¬dicar la injusticia y la pobreza.
Artimalia
Trabajan para la conservación de las especies en vías de extinción. Su lema, “dibujando especies para que no se borren”.
